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Bonjour pouvez vous m'aider a faire cet exercice svp !!
Associez les actions aux images de la légende écoutée en classe.
La légende en question :
La leyenda del maíz
Quetzalcóatl, «la serpiente emplumada» Cuentan que antes de la llegada de Quetzalcóatl, los aztecas solo comían raíces y animales que cazaban. No tenían maíz, pues este cereal tan alimenticio para ellos, estaba escondido detrás de las montañas. Los antiguos dioses intentaron separar las montañas con su colosal fuerza pero no lo lograron.
Los aztecas fueron a plantearle este problema a Quetzalcóatl. –Yo se los traeré- les respondió el dios. Quetzalcóatl, el poderoso dios empleó su astucia. Se transformó en una hormiga y marchó a las montañas. El camino estaba lleno de dificultades, pero Quetzalcóatl las superó, pensando solamente en su pueblo y sus necesidades de alimentación. Quetzalcóatl llegó hasta donde estaba el maíz, y como estaba transformado en hormiga, tomó unos granos maduros entre sus mandíbulas y regresó. Al llegar entregó los prometidos granos de maíz a los hambrientos indígenas. Los aztecas plantaron las semillas. Obtuvieron así el maíz que desde entonces sembraron y cosecharon.
El preciado grano, aumentó sus riquezas, y se volvieron más fuertes, construyeron ciudades, palacios, templos... Y desde entonces vivieron felices. Y a partir de ese momento, los aztecas veneraron al generoso Quetzalcóatl, el dios amigo de los hombres, el dios que les trajo el maíz.
La leyenda del maíz
Quetzalcóatl, «la serpiente emplumada» Cuentan que antes de la llegada de Quetzalcóatl, los aztecas solo comían raíces y animales que cazaban. No tenían maíz, pues este cereal tan alimenticio para ellos, estaba escondido detrás de las montañas. Los antiguos dioses intentaron separar las montañas con su colosal fuerza pero no lo lograron.
Los aztecas fueron a plantearle este problema a Quetzalcóatl. –Yo se los traeré- les respondió el dios. Quetzalcóatl, el poderoso dios empleó su astucia. Se transformó en una hormiga y marchó a las montañas. El camino estaba lleno de dificultades, pero Quetzalcóatl las superó, pensando solamente en su pueblo y sus necesidades de alimentación. Quetzalcóatl llegó hasta donde estaba el maíz, y como estaba transformado en hormiga, tomó unos granos maduros entre sus mandíbulas y regresó. Al llegar entregó los prometidos granos de maíz a los hambrientos indígenas. Los aztecas plantaron las semillas. Obtuvieron así el maíz que desde entonces sembraron y cosecharon.
El preciado grano, aumentó sus riquezas, y se volvieron más fuertes, construyeron ciudades, palacios, templos... Y desde entonces vivieron felices. Y a partir de ese momento, los aztecas veneraron al generoso Quetzalcóatl, el dios amigo de los hombres, el dios que les trajo el maíz.
